La Cilla: Manifiesto de IU Segurilla por el Día de la Mujer, celebrado el pasado 4 de marzo.

II TALLER: "LOS HOMBRES TAMBIÉN TEJEN LA IGUALDAD: CREANDO NUEVOS PATRONES"

Hoy celebramos el día de la mujer, pero también nos planteamos si debemos tomarlo como una celebración o un día de lucha. Y nosotras pensamos que ambas cosas.

Decía Emma Goldman, una de las pioneras en la lucha por la emancipación de la mujer, que si no podía bailar, esa revolución no le interesaba.

No podemos olvidar la gran lucha que comenzaron hace ya muchos años mujeres valientes en todas las partes del mundo. Pero la lucha, las reivindicaciones y el compromiso por lograr un mundo mejor, donde las mujeres tengamos los mismos derechos y oportunidades que los hombres, puede hacerse de manera festiva sin quitarle importancia.

Por eso hoy, nosotras hemos querido CELEBRAR LA LUCHA, y reunirnos para tejer, con un té y buena compañía.

Durante mucho tiempo, las mujeres se han reunido en sus casas o en los gineceos improvisados en los espacios invisibilizados, donde podían ser libres para expresarse.

Seguramente en esos círculos, hace miles de años, empezaron ya a tejerse y a tramarse muchas de las luchas que hoy seguimos reivindicando.

Algunas de las más recientes, son las que dan lugar a este día de la mujer.

El 8 de marzo de 1857 en Nueva York, tuvo lugar una marcha de mujeres contra los bajos salarios y las condiciones inhumanas de trabajo.

52 años más tarde, 15.000 trabajadoras protestaban bajo la consigna "pan y rosas", por la seguridad económica y la calidad del vida, por el derecho al voto y el fin del trabajo infantil.

En 1911, en Boston mueren 140 mujeres trabajadoras de una fábrica textil, en lo que se cree fue un incendio intencionado.

En 1977 las NACIONES UNIDAS proclaman el 8 de marzo como EL DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER, en conmemoración de la lucha de las mujeres por el reconocimiento en un mundo hasta ahora de hombres.

Volvemos a hacer este taller, porque seguimos pensando que los hombres y las mujeres tejemos la igualdad.

Tejer es tramar, es unir los hilos que componen la historia de humanidad. Entrelazando las hebras, creamos redes. Hasta ahora, las redes que se tejían eran machistas, opresivas, discriminatorias y marcadas por el patriarcado. Y sólo depende de nosotr@s, de las mujeres y los hombres, elegir que tipo de red queremos crear. Puede ser una red para retener y controlar, y seguir fomentando los estereotipos de género a los que estamos acostumbradas, o puede ser una red fuerte y protectora ante ese machismo y ante esos roles, que nos siguen oprimiendo y en muchas ocasiones nos condenan a ser ciudadanas de segunda categoría. Una red que sostenga, pero sin aprisionar, que libere a las mujeres de la carga que durante tanto tiempo han tenido que soportar. Relagadas en el ámbito doméstico, las mujeres hace tiempo que nos cansamos de que decidieran por nosotras, de que la sociedad no fuera igualitaria, de que el patriarcado dominara nuestras vidas y no nos dejara involucrarnos.

Creemos que otra sociedad más igualitaria es posible y por eso debemos tejer nuestras propias redes.

Pero a lo largo de la hisoria las mujeres han sido las únicas que tejian. Lo hacían en sus hogares, reuniendose con otras mujeres, pero siempre en los entornos privados y todavía son pocos los hombres que participan.

En los mitos clásicos tenemos numerosos ejemplos de mujeres que tejen. En la Odisea, homero nos habla de un concepto de mujer propio de una sociedad patriarcal. Pero la época primitiva también estuvo llena de poderosas figuras femeninas como Pentesilea o Medea

Penélope, la esposa de Ulises representaba a la mujer romántica que espera fielmente el regreso de su esposo. Pero, si deconstruimos el mito, Penélope también representa un modelo de mujer independiente e inteligente, que se quitó de encima a sus pretendientes durante años tejiendo y destejiendo una mortaja, eludiendo así la elección de un nuevo marido y reinando en Ítaca durante los años en los que Ulises estuvo fuera.

Estos mitos nos hablan también de mujeres tejedoras, que vivian vidas independientes que tomaban sus propias decisiones (como Calipso, Atenea, o Helena, que teje un tapiz sobre la guerra de Troya, sugiriendo que es ella la que teje toda la historia)

En la mitología griega hay otras mujeres que tejen para reafirmar su posición y a menudo son castigadas por usar su poder de una manera abierta. Ellas eligen tejer como expresión de sus ideas.

Aracne, desafió a Atenea a tejer y realizó una obra más bella y por ello fue castigada y convertira en araña en la Metamorfosis de Ovidio.

Este taller se plantea para superar estereotipos antiguos, por ejemplo en Perú, hay una isla llamada Taquile, donde los roles de género occidentales se han traspasado y son las mujeres las que se encargan de preparar la lana y los hombres son los que tejen.

Hasta hace bien poco la mujer decente y hacendosa era la que tejía, bordaba...pero ahora lo reivindicamos como un acto de rebeldía. Ya hemos conseguido que se saque del ámbito privado y queremos desmitificar mitos y romper etiquetas. Tejiendo otra realidad entre hombres y mujeres, tejiendo otro nuevo patrón y destejiendo los patrones sexistas que durante muchos años han mantenido olvidadas a las mujeres, como penélopes tejiendo y destejiendo a la espera de nuestros maridos. Pero también somos penélopes guerreras que destejen astutas su labor las veces que haga falta para cambiar el patrón patriarcal y sexista. Y queremos reclamar nuestros espacios junto a los hombres, para juntos, rehacer el patrón de la nueva sociedad que queremos.

Tejamos junt@s como acto de libertad y construyamos la sociedad que queremos.